Productores de amaranto ponen dique a la mancha urbana

Fiesta en territorio del huautli. En Tulyehualco todo está listo para la tradicional Feria de la Alegría y el Olivo, que se celebrará del 1 al 16 de febrero.

Por: PERLA OROPEZA

Foto: Concurso Capullo de Primavera.

Con la fuerza de sus tradiciones, productores de amaranto de la Ciudad de México constituyen un dique a la mancha urbana y se preparan para celebrar la 49 Feria de la Alegría y el Olivo en Santiago Tulyehualco, del 1 al 16 de febrero.

Pedro Molotla Franco, secretario de la mesa directiva de la feria, dice en entrevista que la explosión demográfica hace cada vez más difícil la actividad agrícola: “La gente sigue vendiendo de forma clandestina, ni siquiera hay calles trazadas y vamos terminando con la tierra de cultivo. Hasta hace unos ayeres Tulyehualco sembraba más o menos 400 hectáreas de amaranto, y ahora si acaso llegamos a 200. La mitad del cerro del Teuhtli — todas sus faldas — ya está llena de gente”.

Pedro Molotla Franco, acompañado de expositoras y la pequeña embajadora de Tulyehualco, una de las ganadoras en el concurso Capullos de Primavera que se realiza en Xochimilco.

Sin embargo, agrega, Tulyehualco es un lugar privilegiado dentro de la geografía capitalina para el cultivo del huautli, nombre náhuatl del amaranto. A sus condiciones climáticas favorecedoras, se agrega la riqueza de la tierra, beneficiada por los minerales expulsados por el volcán Teuhtli.

Molotla relata que desde niño su padre le inculcó el amor por la tierra y por sus productos, ya fueran chile, calabaza, frijol, maíz o amaranto.

“Mi padre fue doctor en historia de México, pero su hobby principal después de ser profesor era cultivar la tierra. Con mi hijo será la séptima generación que se dedica al amaranto. Mi hijo es pedagogo; yo, licenciado en derecho. Mi abuelo, el papá de mi papá, fue la última generación 100 por ciento campesina. La alegría es fundamental para la economía familiar. El 50 por ciento de mi tiempo lo dedico a ser productor de amaranto”.

Su familia es propietaria de ocho hectáreas. Además, arrienda de 17 a 19 hectáreas cada año, para sembrar amaranto. En sus cultivos no aplican ningún tipo de agroquímico y la transformación del producto se da en forma 100 por ciento artesanal.

En 2019 se tuvo un mal año. “El retraso de las lluvias impidió un desarrollo normal en las plantas, que normalmente crecen hasta 2.20 metros de altura y ahora llegaron a un máximo de 1.40. Por eso la producción cayó en algunos sembradíos hasta 50 por ciento”, expone Molotla Franco.

Esto no lo desalienta. En su caso, los ingresos por la comercialización del producto dan sustento a cuatro familias más a lo largo del año.

Sobre todo “si tomamos en consideración que una tonelada de maíz cuesta cinco mil o seis mil pesos, y el amaranto cuesta 12 a 14 mil pesos la tonelada, estamos hablando de una mejoría de 150 a 180 por ciento más”.

Los precios de los insumos, dice Pedro Molotla, tampoco es un tema que preocupe. “Necesitamos piloncillo, yo no utilizo azúcar, ni mucho menos glucosa o melaza que  son los otros tipos de mieles que se pueden usar, que es lo que venden en el metro. Nosotros utilizamos piloncillo, vainilla  y jugo de limón. El limón es un catalizador. Son caras la almendra, nuez, pasa o arándano. Pero hay semillas más económicas como linaza, chía, la semilla de girasol, con lo cual se está mezclando. Otro insumo que se utiliza es el chocolate, y el precio va a depender de la marca, el sabor y la forma de prepararlo. Nosotros utilizamos buen chocolate.

LA FERIA

En los 15 días que durará la feria se prevé una asistencia de 50 mil visitantes, lo cual podría significar una derrama económica de diez millones de pesos para Tulyehualco, que beneficiará a unas 800 familias de la zona.

Es una fiesta completamente familiar, de acceso gratuito, en la que no estará permitida la venta de alcohol —la cerveza de amaranto sólo se venderá para llevar— y se prohíbe la comercialización de artesanía china.

Habrá un concurso de gastronomía basado en amaranto el día 8, recorridos turísticos, talleres, conferencias, conciertos y baile, entre otras actividades

Los expositores harán descuentos de 15 por ciento a niños los miércoles y los viernes a los adultos mayores. Los recorridos y talleres tienen un costo de 20 a 30 pesos.

Para el 50 aniversario de la feria, el próximo año, los organizadores planean “echar la casa por la ventana”. Invitarán a amaranteros de otros lugares de la República, que sean productores primarios —no comercializadores y no industrializados— para que participen en la expoventa.

DATOS DE INTERÉS

  • El huautli, amaranto o alegría es un producto que sirvió de alimentación principal a los habitantes del México prehispánico desde hace seis mil o siete mil años. Con los granos preparaban una harina que servía de alimento en recorridos largos, y que se mezclaba con maíz y miel de maguey.
  • Durante la época de la colonia, su cultivo fue proscrito porque con esa mezcla los indígenas elaboraban pequeñas figuras en ofrenda a sus dioses.
  • El amaranto se considera un importante complemento en la dieta de niños, mujeres embarazadas o en fase de lactancia, por su alto contenido en proteínas (16 por ciento) y además por ser rico en lisina, aminoácido esencial en la nutrición humana, escaso en los cereales comunes.
  • El amaranto en México es cultivado en los estados de Guerrero, México, Morelos, Tlaxcala, Puebla, Ciudad de México, Michoacán y Oaxaca.
  • El pueblo de Santiago Tulyehualco tiene el 87 por ciento de los productores de la Cdmx dedicados al cultivo de amaranto. Milpa Alta 10 por ciento y Tláhuac 3 por ciento
  • El olivo fue traído en la época colonial a esta zona. En la feria participarán 12 productores. No se pierdan los famosos sopes de borra, hechos con una mezcla de aceituna.
  • En la expoventa habrá 58 productores, transformadores y comercializadores de amaranto.

About Perla Oropeza

Licenciada en Periodismo y Comunicación Colectiva por la UNAM, comenzó labores en Notimex en los años 80. Ha sido correctora, redactora, reportera y colaboradora en diversos espacios periodísticos. En EL FINANCIERO trabajó en diversos proyectos, como la edición de Fin de Semana que duró 7 años. Fue editora de la agencia de noticias Finsat y El Financiero Bajío, en el cual intervino desde su planeación hasta el último número publicado, en septiembre de 2019. Desde 2012 dirige grandesempresas.mx, en línea con sus temas favoritos: Negocios, economía y turismo. Twitter: @Perla_O