¿Vives en pareja? Aquí te damos diez consejos para que tu vida financiera no se vuelva una tragedia.
Por Perla Oropeza
Cuando decides vivir en pareja, hay un aspecto que no se debe evitar o dar por entendido. La forma en que se resuelva podría significar una larga relación o iniciar una cadena de errores que lleve a una catástrofe. Sí, me refiero el tema financiero.
Con mis más de tres décadas en una relación, que superó las reiteradas crisis del país y se enfrenta al actual estancamiento económico, creo que puedo dar al menos diez consejos para las parejas que apenas empiezan:
- 1.- No guarden secretos. En esto de las finanzas no se vale ocultar información. Lo ideal es que cada uno sepa lo que gana su pareja y cuáles son sus deudas. De otra manera se da pie a suposiciones que pueden terminar mal.
- 2.- Establezcan un presupuesto. Anoten los gastos que obligatoriamente tienen que realizar cada mes. Gas, luz, agua, renta o pago de hipoteca, mantenimiento, despensa, diversión (por ejemplo, cine o salida a comer). Si hay auto, tenencia o derechos.
- 3.- Diseñen un plan de gasto. Procuren que el nivel de gasto sea equitativo. No puede ser igual, porque dependerá del ingreso. El porcentaje podría ser similar. Si uno gana 40 mil pesos y el otro 30 mil, ambos podrían aportar poco más de 50 por ciento de sus ingresos para el presupuesto global, suponiendo que éste se encuentre en alrededor de 30 mil pesos.
- 4.- Ahorren. Por separado, mantenga cada uno un ahorro para eventuales gastos, planes o emergencias.
- 5.- Asignénse dinero de libre disposición, esto es, del que no deben informar a nadie su destino. Lo que queda a cada uno después de aportar su parte al presupuesto global y al ahorro individual, debe aplicarse libremente a gastos personales (transporte, ropa, discos, libros)
- 6.- Mantengan comunicación. Cuando uno de los dos decida utilizar sus ahorros, debe comunicarlo a su pareja. Ojo, no se trata de pedir permiso, sino de que la otra persona esté enterada de ese tipo de movimientos y dé su punto de vista.
- 7.- Eviten adquirir deuda, realizar compras a plazos o meses sin intereses, a menos que sea un bien duradero e indispensable. (Por ejemplo, el departamento, un auto, un refrigerador o lavadora, nunca prendas de vestir o adornos.)
- 8.- Conviértanse en totaleros. Paguen el total de sus tarjetas de crédito mes con mes, para evitar el pago de intereses. Dejar de pagar las tarjetas puede convertirse en una bola de nieve que no sólo aplaste sus finanzas, sino que provoque la ruina de la relación.
- 9.- Sean solidarios y generosos uno con otro. El que tiene mayores ingresos podría adoptar un gasto de los integrados al presupuesto global, para hacer menor la carga en quien gana menos.
- 10.- De preferencia no presten ni pidan prestado dinero. Muchos pleitos de familia y muerte de amistades empiezan con un préstamo no pagado. Es mejor no prestar o si se realiza un préstamo que sea por una suma que no comprometa el presupuesto familiar ni individual.