En lugares como Polanco llegan a exigir por este concepto hasta seis millones de pesos, cuando la renta es de 85 mil, dice el consultor Juan Manuel Gallástegui.
PERLA OROPEZA / EL FINANCIERO
El ‘guante’ -o suma que las franquicias deben pagar para instalarse en un local de plazas comerciales- se ha disparado en el último año, hasta convertirse en una barrera para el desarrollo del sector.
“El gran problema que siempre han tenido las franquicias cuando rentan, al ser negocios pequeños, es el famoso ‘guante, lo que hay que cubrir adicional a lo que pagas de renta y que a veces es prácticamente impagable”, comenta el consultor Juan Manuel Gallástegui.
En lugares como Polanco, explica, llegan a exigir por este concepto hasta seis millones de pesos, cuando la renta es de 85 mil pesos. “Prácticamente están pidiendo seis años de renta. En algunas ocasiones equivale al costo de la propia franquicia o muy por encima de éste.”
Desafortunadamente, añade, el ‘guante’ es una práctica que llegó para quedarse en las grandes ciudades, donde además las rentas se han disparado desde el año pasado. “Es una barrera para muchas franquicias exitosas que no tienen capital para pagar esa suma.”
En entrevista, el presidente de la firma consultora de Gallástegui Armella Franquicias asegura que para este año las empresas del sector actúan cautelosas, “pero sin miedo”. La única preocupación respecto al proceso electoral es que pudiera derivar en un conflicto, pero mientras tanto genera liquidez en el mercado.
Por otra parte, descarta que sea un problema el alza en los precios de los energéticos. “Creo que las franquicias son muy cuidadosas en manejar sus precios de tal manera que no afecte a su mercado consumidor. Y así lo han hecho. No han sido aumentos desmedidos.”
Para este año, Gallástegui tiene el objetivo de crecer en el Bajío. “Estamos hablando de una región en crecimiento, la región de mayor crecimiento del país. Querétaro crece el doble o triple que muchas entidades del sur o incluso del norte del país y la gran ventaja que tiene es el enorme número de consumidores en un radio de kilómetros muy manejable.”
Sin embargo, ataja, es una región más receptora que desarrolladora de franquicias y por eso su firma buscará impulsar la creación de conceptos propios de la región, en ciudades como Aguascalientes, León y Querétaro, donde pueden tener un mercado cautivo y natural.
Además del Bajío, la firma consultora buscará mayor actividad en el noroeste, desde sus oficinas en Mazatlán y Hermosillo, y atacará con mayor fuerza el mercado de la frontera en Tijuana y Mexicali, al mismo tiempo que mantiene su presencia en el sureste, donde ya trabaja en Mérida y Cancún, y tiene la meta de llegar a Campeche y Chiapas.
Gallástegui informó que durante la 41 Feria Internacional de Franquicias, que se llevará a cabo del 1 al 3 de marzo próximo, contará con un stand que albergará a diez empresas desarrolladas por su firma, entre ellas cuatro dominicanas.
Desde 1988 a la fecha, el despacho Gallástegui Armella ha desarrollado más de mil 400 franquicias y su presidente fue fundador de la Asociación Mexicana de Franquicias en 1989.