Postergar decisiones importantes o la planificación son la raíz de muchos problemas empresariales, como pérdida de oportunidades e incluso quiebras.
De acuerdo con Mario Rizo, socio de Salles Sainz Grant Thornton, tres de cada diez empresarios dejan para mañana lo que deben hacer hoy, en lo que se llama procrastrinación o síndrome de Scarlett, en referencia al personaje femenino de la película Lo que el viento se llevó.
El consultor de empresas y miembro de diversos consejos de administración mencionó que generalmente eso se debe a una falta de atención en el comportamiento de los mercados y del entorno.
“La supervivencia de un negocio dependerá en gran medida de su capacidad de cambio, es decir, del tiempo que le tome implementar las acciones para adaptarse a las nuevas situaciones.”
La detección de los indicadores de riesgo y la aplicación oportuna de medidas correctivas podría representar la salvación del negocio.
Para ello, Rizo recomienda el análisis FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades, Amenazas), una técnica utilizada para comprender la situación actual de una persona, empresa, organización, producto o servicio. Es, en otras palabras, un diagnóstico. Consiste en elaborar un listado de cuatro encabezados que corresponden a las palabras de las que proviene el acrónimo de FODA.
Fortalezas:
• Ventajas respecto a otros.
• Cosas que se hacen bien.
• Lo que otras personas ven como sus fortalezas.
Debilidades:
• ¿Qué debería mejorar?
•¿Qué es lo que considera que hace mal?
•¿Qué cosas debería evitar?
Oportunidades:
• ¿Dónde están las mejores oportunidades que podrían encontrar?
• ¿Cuáles son las tendencias interesantes de las que están conscientes?
Las oportunidades más útiles pueden provenir de cambios en:
– Tecnología y mercados tanto en pequeña como a gran escala.
– Políticas de gobierno relativas a su actividad.
– Patrones sociales, perfiles de la población, cambios en el estilo de vida.
– Acontecimientos locales.
Amenazas:
• ¿Qué obstáculos deben afrontarse?
• ¿Qué hace la competencia?
• ¿Cambian las especificaciones requeridas para desarrollar el trabajo, producto o servicio?
• ¿La tecnología amenaza su posición?
• ¿Hay deudas o problemas con el flujo de fondos?
Otros consejos para evitar el síndrome de postergar planeación o decisiones son:
- Anotar las tareas que se deben cumplir cada día.
- Asignar en cada día un porcentaje del trabajo a realizar por mes, trimestre, año.
- Evitar distractores del tiempo, como visitas o llamadas no programadas.