Con Google Wallet, el pequeño o gran negocio sólo requiere desembolsar una inversión mínima en un lector de tecnologías NFC y luego, sólo bastaría acercar el celular a este equipo y es todo, transacción concretada.
Sin embargo, este dispositivo sólo ha sido desarrollado para los equipos que utilicen el sistema operativo Android, propiedad de Google y que pertenezcan a usuarios que radiquen en Estados Unidos, por lo que los consumidores de otras marcas y naciones continuarán esperando.
Desde el punto de vista del mercado nacional, los usuarios mexicanos están preparados para utilizar al celular como una cartera electrónica, la dificultad es concientizar al mexicano de que debe proteger a su dispositivo con el programa de seguridad más adecuado, sostiene Jorge Mieres, analista de malware de la firma de seguridad informática Kaspersky Lab.
Asimismo, en México existen lagunas en la legislación que pudieran representar “un espacio en los que los piratas informáticos sacarían ventaja para concretar sus planes de robo de información”, comenta Jorge Mieres.
Pese a estos inconvenientes, “no se ve lejano que la tecnología de pagos en el celular comience a reemplazar a la billetera tradicional, quizá en cuatro años sea una certera realidad. Pero antes, nosotros debemos estar preparados para proteger nuestra información, porque los riesgos existirán siempre, apenas en septiembre -de 2011- el 85 por ciento del correo basura se dirigió a los smartphones y en 2011 cuatro de cada diez ataques han estado dirigidos a los dispositivos móviles”.
“Como sea, el pago por el celular es una tendencia con la que vamos a convivir pronto”, refirió el analista de Kaspersky Lab.
Puede que Jorge Mieres tenga razón, pues la consultora Forrester Research señala que en 2011 entre 50 y 60 millones de equipos celulares estarán siendo utilizados en todo el mundo como billeteras electrónicas.